Un sueño...

Anoche tuve un extraño sueño. Soñé que le mataba con mis propias manos. Es extraño lo que uno se pone a pensar cuando está enerma, alejada de todo el mundo. Es imposible que yo siquiera me imaginara asesinar a quie considero una persona mu preciada para mi, tal vez demasiado... y lloré, lloré porque vi en mis manos aquella sangre, con la claridad con la que veo ahora mis manos desnudas. Es duro no saber nada de é, es duro recordar que en mi sueño yo labava su sangre de mis manos... Pero nada puedo hacer más que esperar una recuperación y cerciorarme de que todo estça tal cual como lo estaba antes de caer en esta enfermedad....